Diferencias entre la ganadería intensiva y ganadería extensiva
La ganadería es una actividad esencial dentro de todo el trabajo que agrupa el sector primario en España. Un proceso muy vinculado al país y toda su gran variedad de alimentos como la leche o la carne y materias primas como la lana o el cuero que se emplean en multitud de sectores. Somos un país preponderante en este tipo de actividades para generar materias primas y cultivos para consumo propio estatal, así como para exportar a todo el mundo.
A pesar de la importancia de la ganadería en nuestro país, este sector resulta muy desconocido para la mayoría de personas. Por eso, a continuación, te contamos todo lo que necesitas saber sobre la ganadería intensiva y extensiva para que te sea más fácil diferenciarlas y saber qué engloba cada una de estas actividades ganaderas.
Qué es la ganadería intensiva
La ganadería intensiva se desarrolló para hacer frente al rápido crecimiento de la población que se produjo durante el siglo XX. Lo que se buscaba era una opción que garantizara una gran producción de alimentos, pero sin que el coste se disparase.
Se considera una ganadería más industrializada, puesto que los animales no están en libertad. En la ganadería intensiva los animales se encuentran estabulados, con el objetivo principal de incrementar la producción de alimentos o materias primas en el menor tiempo posible.
La principal ventaja de la ganadería intensiva es su gran eficiencia, permitiendo obtener unos excelentes resultados de producción en poco tiempo. Así mismo, se adapta con mayor rapidez a los cambios en la demanda, reduciendo los gastos asociados a la explotación agrícola.
Por otro lado, el mayor problema de la ganadería intensiva es que no se puede mantener indefinidamente en el tiempo. A esto hay que sumarle su gran impacto medioambiental, siendo de las industrias más contaminantes.
Ganadería extensiva
La ganadería extensiva es mucho menos agresiva que la intensiva. Caracterizándose por emplear métodos más tradicionales, donde se crean espacios que imitan los ecosistemas naturales. Esto favorece un desarrollo más favorable y natural de los animales. En los últimos años ha surgido la ganadería extensiva sostenible que tiene como objetivo mantener un buen nivel de producción, pero limitando el impacto en el medio ambiente.
La principal ventaja de la ganadería extensiva sobre la intensiva es que los productos que se producen son de mayor calidad, gracias a que los animales crecen en un entorno mucho más natural, y usando maquinaria agrícola adecuada como las picadoras de paja para granjas. Así mismo, su impacto medio ambiental es mucho menor, y ayuda a mantener los ecosistemas naturales y la diversidad de los mismos.
Su mayor inconveniente está relacionado con la producción. Por un lado, requiere mucho más tiempo para producir alimentos. Y, por otro lado, no se puede adaptar con facilidad a los cambios en la demanda de los consumidores como si hace la ganadería intensiva.
El futuro de la ganadería extensiva
En los últimos años la importancia de la ganadería extensiva ha experimentado un gran crecimiento y se espera que esta tendencia continúe con el paso del tiempo. Esto se debe a que el trato a los animales y el medio ambiente se ha convertido en dos filosofías de decisión determinantes para los consumidores en el momento de elegir los productos. La tendencia actual exige, cada vez más, que los productos que consumen se hayan fabricado respetando los derechos de los animales y de forma ecológica.
Esperamos que esta guía te sirva de utilidad para diferenciar los dos principales tipos de ganadería que existen actualmente.
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